Los suplementos alimenticios diseñados para combatir la caída del cabello suelen contener una combinación de vitaminas, minerales, y otros nutrientes esenciales. Estos actúan reforzando la estructura capilar, mejorando la circulación sanguínea en el cuero cabelludo, y estimulando el crecimiento de cabello nuevo. Es importante recordar que la constancia es clave al tomar estos suplementos, y generalmente se recomiendan al menos tres meses de tratamiento para observar resultados significativos.
Además, el uso de shampoos y acondicionadores de calidad que contengan ingredientes fortalecedores y nutritivos puede complementar la acción de los suplementos, ayudando a mantener el cabello sano y fuerte.